jueves, 1 de noviembre de 2012
Escritura Automática 84
Era de noche, los gatos maullaban ala luna, las palomas dormían en sus agüjeros, una ligera brisa acariciaba mi cara con ternura.Estaba en el tejado de mi apartamento, los semáforos seguian el compas y el tránsito obedecia silencioso sus normas luminosas.
Abrí los ojos , estirado en aquel extraño suelo irregular de tela asfáltica, y cogí su zapato negro de tacon, abrillantado por mi horas antes , lo acaricie desde la punta hasta el tacon , afilado como una daga , repasé con mi lengua todos sus bordes y rincones, finalmente lo llené de vino y bebi lentamente, con tragos cortos, sujetandolo con cuidado como cuando asomas a un niño por la ventana para que vea como pasa un desfile de caballos blancos.
El silencio de la noche puso en relieve un lejano altercado que se oia muy a lo lejos, se oían bocinas, golpes metálicos y algun tiroteo tartamudo sin replica.
Llené su zapato varias veces, la botella de vino estaba muriendo, saqué de mi bolsillo tus medias de nylon que te robé hace dos noches. Los ojos luminosos de un gato aullador me miraban curiosos, como si quisieran robarme el alma.Agarré la botella y la tire hacia la luminosidad curiosa que me estaba atosigando.
Las olí con delicadeza, acaricie mi cara con ellas, como una serpiente desinchada de escamas suaves, aun estaba su olor una mezcla de perfume caro y sudor afrutado, mi corazon bum bum bum, como tambores de procesión.
Encendí un cigarrillo y me até sus medias al cuello, desabroché mis pantalones con lentitud, el vino me dejó noqueado, como medio hundido en el lodo, y cogí mi miembro despierto coolcado hasta arriba de amfetamina, parecía como si él hubiera olido tambien tus medias.
Aprete el nudo que abrazaba el nylon con mi cuello, lentamente pero sin retorno, mi mano izquierda agitaba en crecendo mi miembro dislocado, noté el humedo sudor de la asfixia, el calor en las sienes, el pálpito extendido del ritmo cardíaco....oía tus gemidos y frases cortas en las bocas de los gatos en celo que se agrupaban con violencia, bom bom bom bom.......empezaron los espasmos, se arqueaba mi espalda, la visión se nublaba, mi boca se abria y se cerraba como un pez fuera del agua.
Seguía apretando , tu olor afrutado tu perfume caro, el color de tus uñas de tus pies nacarinos, tus gestos controlados de desaprovación, tu saliva abrillantando tus labios pequeños pero decididos, tus pasos largos clavando los zapatos en el suelo, tu lirica dañina que nos hacía sentir desechables, ....
acabé con una tormenta de un solo trueno, un solo rayo que salpicó todo mi cuerpo y cara, mis brazos cayeron como una marioneta sin hilos, tus medias seguian abrazadas, mi boca abierta , con hilillos de baba cayendo ....
Los gatos se acercaron a mi cuerpo inerte, pasaron sus naricillas humedas y lamieron lo que quedaba de vino de uno de tus zapatos negros, perezosamente otro grupo morrongos parduzcos y rayados se deleitaban en un festin de sangre dulce que rodeaba la silueta de una silfide semi desnuda, sin zapatos ni medias, con los brazos estirados hacia afuera....
el esplendor de la decadencia.
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