lunes, 23 de junio de 2014

Rudolf Schwarzkogler







Plano #1




 Esta estirado en un sofa viejo, de un azul apagado. Sus pies cuelgan sin calcetines en uno de sus extremos.Uno de sus brazos cubre su cara, a modo de protector solar.Su boca sonrie lentamente.
En una especie de sueño recuerdo, aparecen unas manos menudas, de unos 11 años, pasandose un periodico de unas a otras. Subrayando con flourescente azul anuncios de contactos. Se oyen risitas nerviosas, provocadas por las escuetas descripciones que aparecen. Las medidas de las candidatas, sus objetivos, tarifas...
Él, traza un circulo en uno de ellos. No le llama la atención ni sus medidas, ni objetivos, ni especialidades.es la introducción del anuncio: "Estoy sola, muy sola, me acompañas?"

Por medio de un sorteo ridículo, le toca realizar la llamada.Coge el telefono con sus manitas  temblorosas y marca el número, bajo las miradas burlonas de sus amigos.
Aparece una voz seca, provinciana, aunque realmente casi no la recuerda.

-"Hola?"
-".....eemmm Hola...mmm...eeemm...estas s sssola?"
-".....si estoy sola...............mm...pero...pero...tu eres muy pequeñito"

Colgó el telefono rapidamente, las risas sonaron por todo el despacho, él estaba sonrojado, extrañamente eufórico.... le habían descubierto,

El sol acabó por despertarlo, Se quedó varios minutos sin moverse. Con una extraña sonrisa agridulce. El sol iluminaba su cara, haciendo entrecerrar sus ojos y gesticular una mueca de repulsa.
Se preguntó, el porqué siempre   le hacian mover los detalles secundarios, lo que se esconde bajo la piel, la puta mania de inventar historias.