jueves, 16 de diciembre de 2010

Escritura Automática -51-


No sabía hacer nudos.No conocía ni los más populares. La gran mayoría de ellos, sabia que estaban hechos para algún día, ser deshechos.
Yo creaba nudos imposibles de deshacer, tanto por su complejidad como por su absurda composición.
Llegué a casa, tarde, por la noche, me quedé embobado, frente al espejo, cepillando mis dientes mecánicamente, una baba de pasta de dientes rica en fluor cayó de mis labios, como una gran corrida en mi boca.
Mis ojos desenfocados, encontraron el descanso en el reflejo del abismo.

Mi vida era imposible de desnudar, llena de errores del pasado, paradójicamente, me sentía desnudo ante la vida, las palabras a menudo se convierten en una ironía, la vida se funde y tus palabras se evaporan.

Perdí la vista por un momento, el brillo de tus ojos me dejo ciego e indefenso. Palpé con mis manos los objetos cercanos, necesitaba sentir que aún pertenecía a esta dimensión, escribí tu nombre al revés en el cristal lleno de vaho.
El ventilador refrescaba mi cara, los tornados devastan casas, quiero estar solo y a la vez, acompañado.Los contrastes siguen sorprendiéndome una vez mas
En la ventana, el escenario vaporoso y gris se movía imperceptiblemente, estaba cansado de enviar mensajes en código Morse y no obtener respuesta


Escuchar: Pyrolator-Have a Good Ride

2 comentarios:

  1. Nunca creí en los nudos, al final siempre se terminan deshaciendo o gastando hasta romperse.

    Si, a veces hay que desenfocar la realidad para hacerla real.

    Muá

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  2. Yo siempre llevo los cordones de las bambas deshechos

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